La respuesta es sencilla: Porque somos enfermeras. Con base científica en la Cuidadología. Y porque, como decía Leonardo da Vinci, "la sencillez es la máxima sofisticación".
Nos quejamos muchísimo de que el sistema sanitario está centrado en las patologías. Pero no cambiamos, nosotras tampoco, el enfoque. La mirada. Seguimos viendo enfermedades y no personas. ¿Cuál es la prueba? Acude como paciente a cualquier centro sanitario... y sométete a él... El trato centrado en las personas, la atención integral, etc, etc... brillan... pero por su ausencia. Es triste pero también es solo la opinión de quien escribe. Que igual coincide con la tuya... no lo sé...
Si queremos ser enfermeras -cuidadólogas- debemos diagnosticar necesidades, respuestas, e incluso experiencias, humanas, de las personas a las cuales servimos. Porque trabajamos en un servicio de salud. Y el diagnóstico de dichas cuestiones es el diagnóstico enfermero. No hablo de etiquetas, no hablo de estándares ni de pegatinas. El diagnóstico es el enunciado de una necesidad que requiere algún tipo de cuidado enfermero. Que es percibido así también por el paciente y su familia. Compartido. Y formulado como eje principal sobre el que se vertebra el archifamoso plan de cuidados.
Por favor, si eres enfermera, diagnostica. Pero si diagnosticas, hazlo bien. Con sentido. De manera precisa. Olvidando los estereotipos y los corta y pega. Piensa en la persona a la que atiendes y resume en dos, tres o cuatro palabras sus necesidades principales. Y de ahí sale el diagnóstico. De forma natural, sencilla y clara. Porque para eso eres enfermera, con una mirada sensible a esas necesidades. Puede que hayas perdido ese radar pero no has dejado de tenerlo. Solo hay que activarlo.
Y si diagnosticas, escarba un poquito más con base en un razonamiento lógico, porque de ahí saldrá un plan de cuidados. También sencillo y directo. Y de acuerdo con el paciente. Para que tome parte del plan y sea ejecutor principal de su éxito.
Recuerda que el lenguaje es clave para el entendimiento, para la comprensión, para la interacción. El registro de todos estos elementos del cuidado es fundamental para arbitrar la ciencia de la salud. Para dar cabida a un verdadero método científico de las enfermeras. A un cómo cuidar mejor para obtener los resultados esperados. Piensa, escribe, lee, sé, está...
Cada vez hay más conciencia entre los profesionales de la salud respecto a la importancia de los cuidados. Independientemente de cuál sea la enfermedad, el resultado no será bueno si no hay implicación en los cuidados. Y aquí la voz cantante la lleva el paciente, su familia, y las enfermeras. Pero solo si tomamos el mando. Si lo dejamos... lo que pasará ya lo sabemos por épocas anteriores... ¿No dicen que este es el año de las enfermeras? Pues hagamos visibles las necesidades de cuidados poblacionales. Nosotros ya estamos en ello. Con proyectos organizativos, formativos y de investigación para hacerlas ver, para hacernos ver, para hablar sobre el tema en foros multidisciplinares. ¿Te lo vas a perder?