"Nuestro deseo es ser capaces de identificar, a través de la investigación clínica y el metaanálisis/metasíntesis, aquellas características definitorias que se requieren para identificar un diagnóstico (características definitorias críticas)" y eliminar aquellas que no son útiles desde el punto de vista clínico".
En este punto es importante recordar los ejes que conforman los diagnósticos de NANDA-I pues tenemos muy presente también el debate de si aquellos enunciados diagnósticos que representan síntomas deben ser considerados o no como diagnósticos enfermeros y en consecuencia excluidos de la taxonomía.
El eje 1 es el foco del diagnóstico, elemento principal. Representa la raíz del concepto diagnóstico enfermero pues describe la propia "respuesta humana". Existen hasta 170 focos diagnósticos. Por ejemplo: aflicción, conductas para la salud, dolor, habilidad para la traslación, patrón respiratorio, negación, relación, salud, soledad, transición migratoria... entre otros...
El eje 2 se conforma con el sujeto del diagnóstico. Puede ser el individuo, el cuidador, la familia, un grupo o la comunidad.
El eje 3 representa el juicio y limita o concreta el significado del foco diagnóstico. Existen 34 tipos de los cuales algunos ejemplos son: alterado, déficit, deteriorado, disfuncional, inestable, mejorado, situacional...
El eje 4 se refiere a la localización, es decir, a las partes o regiones del cuerpo y sus funciones. Conforman un total de 23 términos (cardíaco, gastrointestinal, membranas mucosas, periférico, vascular, etc).
En el eje 5 se abordan los grupos de edad: feto, neonato, lactante, niño, adolescente, adulto, adulto mayor y adulto anciano.
El eje 6 contempla el tiempo, la duración del foco diagnóstico: agudo (<3 meses), crónico (3 meses o más), intermitente y continuo.
Por último, el eje 7 que es el estado del diagnóstico. Se refiere a la existencia o potencialidad del problema en cuestión, o a su categorización como diagnóstico de promoción de salud. Hay por tanto, como bien sabemos, diagnósticos focalizados en problemas (incluyendo los de síndrome), diagnósticos de riesgo y los de salud (disposición para mejorar).